SALTILLO, COAHUILA.- La Fiscalía General de Justicia de Nuevo León investiga la muerte de Jaqueline Yamileth Briones Torres, originaria de Saltillo, quien falleció el pasado martes 12 de agosto tras someterse a una lipoescultura en el Edificio Médico de Especialistas, en la colonia Obispado de Monterrey.
De acuerdo con la indagatoria, Jaqueline llegó a Monterrey el lunes 11 de agosto para realizarse el procedimiento, financiado a través de la empresa “Toque Divino”, que incluso difundió una fotografía de la paciente con su “kit quirúrgico”, identificándola como la cliente 973.
El martes por la mañana ingresó al quirófano para la cirugía, a cargo del cirujano Sergio “N”. Durante la intervención, sufrió una hemorragia severa provocada por laceraciones en el pulmón y el hígado, presuntamente causadas por un objeto punzante.
Testimonios señalan que, ante las complicaciones, el médico abandonó el quirófano y el anestesiólogo Julio César “N” coordinó el traslado al Hospital Universitario, donde Jaqueline llegó a las 22:00 horas sin signos vitales.
La Fiscalía Especializada en Feminicidios y Delitos Cometidos contra las Mujeres cateó el consultorio el miércoles 13 de agosto, asegurando cánulas, jeringas, una bata, una libreta, muestras rojizas y un DVR. También se tomó declaración al personal, incluido el cirujano, quien no cuenta con afiliación al Colegio de Cirujanos Plásticos, lo que refuerza sospechas de ejercicio indebido de la profesión.
La autopsia confirmó que la causa de muerte fue por lesiones intratorácicas e intraabdominales. El 14 de agosto, la Secretaría de Salud suspendió la clínica por irregularidades sanitarias. Hasta ahora no hay personas detenidas, pero la investigación continúa para determinar responsabilidades penales.
