En unas palabras que han resonado por toda Europa y más allá, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, señaló este lunes que “no hay que excluir” el envío de tropas occidentales a Ucrania para apoyar a este país en su guerra contra Rusia.
Estas declaraciones llevaron a los líderes de Europa y EE.UU., miembros de la OTAN, a expresar de manera generalizada su desacuerdo con la idea.
Rusia ha advertido en repetidas ocasiones de que cualquier despliegue de tropas occidentales en Ucrania desencadenaría un conflicto directo entre Moscú y la alianza militar.
“En este caso, no debemos hablar de la probabilidad, sino de la inevitabilidad [de un conflicto]. Así es como lo evaluamos”, dijo Dmitry Peskov, secretario de prensa del presidente ruso, Vladimir Putin, al ser interrogado sobre las palabras de Macron.
“Y estos países deberían evaluarlo y ser conscientes de ello de la misma manera. Y preguntarnos si esto corresponde a sus intereses y, sobre todo, a los intereses de los ciudadanos de sus países”, añadió.