El sospechoso detenido por el asesinato del ex Primer Ministro japonés Shinzo Abe confesó haber cometido el crimen, indicó un alto responsable de la Policía de la región de Nara (oeste de Japón), donde ocurrió el homicidio.
«El sospechoso declaró tener rencor hacia cierta organización, y confesó haber cometido el crimen porque creía que (…) Abe estaba vinculado con ella», declaró este policía, que rehusó dar más detalles.
Previamente, las autoridades indicaron que el supuesto asesino de Abe era un ex integrante de la Marina japonesa, ahora desempleado de 41 años, Tetsuya Yamagami, quien aseguró que utilizó un arma de fabricación casera de 40 centímetros de largo.
«Es una afirmación del sospechoso, y hemos determinado que (el arma) es claramente de apariencia artesanal, aunque nuestro análisis está en curso», señaló a la prensa un policía de la región de Nara.
Las autoridades confiscaron otro tipo de armas similares en la casa del sospechosos así como una computadora personal.
El ataque contra el político más conocido del país, de 67 años, tuvo lugar en un mitin al aire libre para las elecciones senatoriales del domingo.
Abe recibió dos disparos en el cuello y heridas en el pecho a una distancia de 3 metros. Su muerte fue confirmada a las 17:03 horas, tiempo local, poco más de cinco horas después del atentado.
Japón tiene algunas de las más estrictas leyes contra la tenencia de armas en las principales economías del mundo, y los tiroteos son raros en el país.