Los avisos y las advertencias de calor excesivo estuvieron vigentes este domingo para alrededor del 23 por ciento de la población estadounidense, ya que 75 millones de un total de 329 millones de habitantes se vieron afectados.
Las alertas se realizaron en la zona sur y centro del país, en lo que es una continuación de una ola de calor abrasador que resultó en temperaturas récord el sábado en 16 ciudades, según el Servicio Meteorológico Nacional.
El sábado, la temperatura alcanzó más de 45 grados Celsius en el aeropuerto Sky Harbor de Phoenix, empatando un récord establecido hace más de un siglo.
El calor subió a más de 37.5 grados y más en Las Vegas e incluso en Denver, donde nevó hace menos de un mes.
En el Valle de la Muerte en California, uno de los lugares más cálidos del mundo, las temperaturas se dispararon a un récord diario de 50.5 grados el sábado.
En total, 27 comunidades empataron o rompieron récords de temperatura el sábado, según mostraron los datos del Servicio Meteorológico.
Las autoridades de Phoenix advirtieron a las personas que presten atención a los avisos y tomen en serio el calor.
«Recuerde, el calor es el principal asesino relacionado con el clima en Estados Unidos», señalaron.
Cada año, más de 600 personas mueren a causa del calor excesivo, según cifras del Gobierno.