El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidosse contrajo de nuevo en el segundo trimestre, un 0.9 por ciento en proyección anual, haciendo crecer los temores de que la primera economía del mundo entre en recesión.
En el primer trimestre, el PIB se contrajo 1.6 por ciento, según las cifras publicadas este jueves por el departamento de Comercio.
La definición comúnmente aceptada de recesión corresponde a dos trimestres consecutivos de disminución del PIB, pero muchos economistas, así como la Administración Biden, afirman que la economía no está necesariamente en recesión pues muestra otros indicadores más favorables.
Tras conocerse los datos del PIB, los índices en Wall Street operan con pérdidas mientras que la Bolsa Mexicana de Valores avanza con moderación.
En el mercado de cambios al menudeo, el dólar se vende a 20.87 y se compra a 19.73 pesos, sin cambio frente al cierre de ayer.
El consumo personal, la mayor parte de la economía, aumentó a un ritmo del 1 por ciento, una desaceleración con respecto al periodo anterior.
La proyección mediana en una encuesta de economistas de Bloomberg apuntaba a un avance del 0.4 por ciento en el PIB y un aumento del 1.2 por ciento en el gasto del consumidor.
Es probable que el informe se sume a los dolores de cabeza políticos para el Presidente Joe Biden y complique el cálculo de la Reserva Federal sobre la agresividad con la que aumentar las tasas de interés.
Además de la desaceleración del gasto de los hogares, el informe también mostró caídas en la inversión empresarial, los gastos del Gobierno y la vivienda. Los inventarios también pesaron sobre el PIB, mientras que un déficit comercial más estrecho se sumó a la cifra.
Un indicador clave de la demanda subyacente que excluye los componentes de comercio e inventarios (las ventas finales ajustadas por inflación a compradores nacionales) cayó a un ritmo del 0.3 por ciento en el segundo trimestre, en comparación con una ganancia del 2 por ciento en el periodo anterior.