El día en que Agustín García Reyes «El Chereje» presuntamente fue trasladado ilegalmente al río San Juan, Tomás Zerón de Lucio instruyó esconderlo para evitar que lo vieran funcionarios de Naciones Unidas que se encontraban en el lugar, entre ellos el hoy Fiscal del Caso Iguala, Omar Gómez Trejo.
Notas Relacionadas
Así lo manifestó Bernardo Cano Muñozcano, ex secretario particular de Zerón y actual testigo colaborador de la Fiscalía General de la República (FGR), quien declaró que en la zona en la que se hallaron 2 bolsas con restos humanos, él vio al menos 4 en tres sitios distintos. Cano grabó esos hallazgos y entregó el video a la FGR.
El 28 de octubre de 2014, Zerón, entonces jefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), sacó a «El Chereje» de los separos de la SEIDO y lo trasladó por helicóptero a la zona del río San Juan, para que le indicara los sitios donde el grupo criminal Guerreros Unidos presumiblemente había calcinado y tirado los restos de los normalistas.
Casi al final del recorrido, Zerón, Cano y Abraham Eslava Arvizu, ex jefe de la Unidad de Robo de Vehículos de la SEIDO, se trasladaron con «El Chereje» en un vehículo a una cancha de futbol en la que estaban otros funcionarios de la PGR, la Policía Federal Ministerial (PFM) y marinos.
Pero no esperaban que estuvieran funcionarios de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH).
«En el lugar estaban dos funcionarios de la ONU, quienes acababan de aterrizar o al menos eso dijo Tomás Zerón, saludándolos y señalándoles que los agentes de la policía los acompañarían hasta el basurero, uno de ellos era el actual Fiscal del Caso Ayotzinapa, Omar Gómez Trejo; Tomás Zerón instruyó que esperáramos hasta que se fueran para sacar al detenido (quien se encontraba en unos vestidores de la cancha de futbol), subirlo al helicóptero y regresar a la Ciudad de México, cosa que me extrañó porque, según yo, no había nada que esconder y lo habíamos trasladado para identificar el lugar de su narración, pero por alguna razón no quería que lo vieran esos funcionarios de la ONU», dijo Cano a la FGR en su testimonio del pasado 4 de mayo, incluido en la orden de aprehensión contra Jesús Murillo Karam, ex titular de la PGR.
«Quiero recalcar que desconozco que al detenido Agustín García Reyes se le haya sacado de manera irregular, porque, como he referido siempre, pensé que se había realizado su salida conforme a los requisitos legales que existían, incluso en la conferencia de prensa de abril de 2016, Tomás Zerón señaló que sí tenía oficio para sacar al detenido, cuestión que he siempre dado por válida y no tenía motivos para desconfiar».
Según el testigo colaborador de la FGR, en esa ocasión estaban en la cancha de futbol José Luis Martínez Pérez, entonces delegado de la PGR en Guerrero; Gerardo Ruiz Dosal, secretario particular de Murillo Karam, y Eduardo Cerón García, vocero de la entonces Procuraduría.
«Abordamos el helicóptero, despegó e hicimos un sobrevuelo en el lugar identificado donde se arrojó las bolsas, según la versión de Agustín García Reyes; cuando recorrimos el cauce del río desde el aire observamos un banco de arena muy grande y yo les manifesté que revisáramos ese lugar a ver si no había bolsas para posteriormente regresar a la Ciudad de México», narra el testigo colaborador.
Hallazgo de la marina
El 29 de octubre de 2014 buzos de la Marina hallaron en el río San Juan dos bolsas con restos humanos, entre los cuales estaban las muestras que permitieron identificar a Alexander Mora Venancio, uno de los 43 desaparecidos.
Pero Bernardo Cano declaró a la FGR que un día antes del hallazgo él vio un total de 4 bolsas en la maleza, el lecho del río y bajo un puente, al pie de corriente, un testimonio que a la Fiscalía le hace suponer que hubo pérdida de evidencias.
El testigo colaborador, además, entregó a los fiscales del Caso Iguala un video con cortes del recorrido que hizo el 28 de octubre de ese año junto con Zerón en la zona del río San Juan.
La encomienda que tuvieron en esa diligencia, señalada de ilegal, era hallar 8 bolsas de plástico con las cenizas de los estudiantes, dato que les proporcionó «El Chereje» en un testimonio que ahora la FGR afirma que fue obtenido bajo tortura.
«Recuerdo haber visto restos de varias bolsas, entre la maleza, en el lecho del río que en ese momento no llevaba mucha agua por lo que se alcanzaba a ver el fondo. Lo que se aprecia el video que se entregara para la investigación. Caminamos hacia el puente, ubicado a unos 50 metros del lugar donde nos encontrábamos (río) y allí vimos otra bolsa que se encontraba en la orilla del río bajo el puente. En ese momento, Tomas Zerón indicó que nos retiraríamos y que esperarían a los peritos para comenzar los trabajos de identificación en lugar (puente)», dice.
«Regresamos a la cancha de futbol y ahí se encontraban ya los peritos de quienes identifico a Mauricio Cerón Solana, Tomás Zerón le indicó que fueran al río y que estábamos buscando 8 bolsas negras de basura con los restos del incendio en su interior, yo lo interrumpí para señalar que habíamos visto 4 bolsas desde la orilla, él dijo que buscábamos ocho bolsas, atendiendo a la narración de Agustín García Reyes».
De acuerdo con Cano, al iniciar la búsqueda, con base en las indicaciones de «El Chereje», encontraron bolsas.
Incluso el delegado de la PGR en Guerrero, José Luis Martínez Pérez, se metió al agua por instrucciones de Zerón y fue el primero en hacer un supuesto hallazgo.
«Recuerdo haber visto restos de varias bolsas, entre la maleza, en el lecho del río que en ese momento no llevaba mucha agua por lo que se alcanzaba a ver el fondo.
Lo que se aprecia el video que se entregará para la investigación», dijo el testigo colaborador.
«En cuanto al río, no estaba lleno, pero noté que llevaba cause, el compañero José Luis Martínez Pérez ingresó al río y el agua aproximadamente le llegaba a la rodilla, del que sacó una bolsa y la puso en la orilla del mismo río. Tomás Zerón de Lucio señaló el lugar a buscar mientras yo filmaba, al mismo tiempo José Martínez Pérez inspeccionaba el lugar».