La agencia supervisora de energía nuclear de Naciones Unidas ofreció este lunes algo de esperanza en la crisis en torno a la central nuclear de Zaporiyia, situada en una zona de Ucrania donde hay combates, al anunciar que su misión de expertos de alto nivel estaba «en camino» al lugar, mientras los nuevos ataques en la zona avivaban el temor a una catástrofe.
Y si bien tanto Moscú como Kiev celebraron el inicio de la misión, ambos siguieron cruzando acusaciones de ataques en la región en torno a la planta. No era posible verificar de forma independiente ninguna de las versiones.
El director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica, Rafael Grossi, llevaba meses buscando acceso a la planta de Zaporiyia, la más grande de Ucrania y de Europa. Está controlada por fuerzas rusas y operada por trabajadores ucranianos desde poco después de que comenzara la guerra hace seis meses.
«Ha llegado el día», escribió Grossi en Twitter. «La Misión de Apoyo y Asistencia (…) está ya de camino».
Ucrania ha acusado a Rusia de básicamente mantener la planta como rehén, almacenar armas allí y lanzar ataques desde la zona. Por su parte, Moscú, acusa a Ucrania de disparar de forma imprudente sobre las instalaciones. Ninguna de las dos versiones ha sido verificada de forma independiente. La central, que tiene seis reactores, se desconectó brevemente de la red eléctrica la semana pasada bajo el fuego de proyectiles.
«Debemos proteger la seguridad de la instalación nuclear más grande de Ucrania y Europa», escribió el responsable del OIEA, con sede en Viena. «Orgulloso de liderar esta misión, que estará en (Zaporiyia) esta semana».
Grossi compartió una imagen en la que aparecía con otros 13 expertos, sin dar más detalles.
Las acusaciones de ataques
Ucrania reportó el lunes impactos de proyectiles en la ciudad de Nikopol, al otro lado del río Dniéper desde la central, e informó de un muerto y cinco heridos. En Enerhodar, apenas a unos kilómetros de la planta, el Alcalde ucraniano de la ciudad, Dmytro Orlov, dijo que al menos 10 residentes habían resultado heridos por proyectiles rusos.
«Al parecer (los rusos) han ensayado su escenario antes de la llegada de la misión del OIEA», dijo Orlov en Telegram.
El Ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, dijo que «sin exageración, esta misión será la más difícil en la historia del OIEA».
«Esperamos de la misión una declaración clara de hechos, de infracciones (…) de todos los protocolos de seguridad nuclear. Sabemos que Rusia no sólo pone a Ucrania, sino a todo el mundo en riesgo de un accidente nuclear», dijo Kuleba en Estocolmo.
En Moscú, el vocero del Kremlin Dmitry Peskov acusó a Ucrania de lanzar proyectiles contra la planta y sus aledaños.
«Creemos que todos los países deben subir la presión sobre el bando ucraniano para obligarlo a dejar de amenazar al continente europeo al atacar el territorio de la central nuclear de Zaporiyia y sus zonas circundantes», dijo.
Peskov señaló que Rusia garantizaría la seguridad de la misión del OIEA «ante la amenaza constante que plantean los ataques continuados del bando ucraniano».
La agencia nuclear ucraniana pintó un sombrío panorama al difundir un mapa que preveía hacia dónde podría expandirse la radiación desde Zaporiyia.
El OIEA tuiteó que la misión evaluará los daños físicos en las instalaciones, «determinará la funcionalidad de los sistemas de seguridad» y evaluará las condiciones del personal, entre otras cosas.