El derribo de árboles por obras de la nueva sede de la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México será pausado por tiempo indefinido.
Aunque las autoridades no han respondido a las peticiones de colonos para que se detenga por completo, este martes, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dijo que el acuerdo es dialogar sobre disminuir el número de ejemplares que se pretende talar.
«Por lo pronto (…) llegaron a este acuerdo, vamos a seguir platicando», expresó.
Vecinos se manifestaron contra la tala desde el fin de semana, luego que durante la madrugada del sábado, 30 árboles saludables de fresno, laurel y liquidambar, algunos de hasta 25 metros de altura, fueron talados por la empresa constructora en la Calle Presa Angostura, Colonia Irrigación.
Según se indicó, la autorización permite derribar 122 árboles y a cambio la restitución de 394 ejemplares dentro de la Embajada.
Sheinbaum destacó que el derribo de árboles sanos fue autorizado por autoridades anteriores y dijo que se trata de un proyecto de la Embajada, que tendrá diversas facilidades, entre otras, conexiones que se realizan actualmente de agua potable y drenaje.
«Y por supuesto queremos dar todas las facilidades para que la Embajada se establezca adecuadamente, ahora también nos interesa el medio ambiente de la Ciudad y nos interesa que no se corten tantos árboles, por eso es la petición a que se revise si realmente es necesario cortar porque están afuera de la construcción, sea por razones de seguridad o por otras razones y yo estoy segura que de parte de la Embajada pues tienen el mismo objetivo de conservar la naturaleza», dijo.
«De todas maneras nosotros vamos a insistir en que se revise el número de árboles que estaban autorizados para quitarlos que eran un número importante», puntualizó la Mandataria local.