TORREÓN, COAH.- Con éxito se llevó a cabo en un hospital privado de Torreón la cirugía para colocar en un paciente de Parkinson el primer neurotransmisor dotado de un nuevo modelo de inteligencia artificial capaz.
Este dispositivo detecta la actividad de las neuronas, para conocer cómo está el paciente a lo largo del día y poder así programarlo a la medida e incluso tener una estimulación responsiva.
El doctor Nery Alexander González Rodríguez, neurocirujano su especialista en neurocirugía estereotipia y radio neurocirugía, dijo a VANGUARDIA que es el primer estimulador de este tipo que se implanta en México.
“Acabamos de poner un dispositivo que es lo más nuevo que hay en el mundo para la estimulación cerebral profunda, es el primero que se implanta en México, ya con una especie de inteligencia artificial”, explicó el facultativo.
Este estimulador tiene la capacidad de detectar la actividad de las neuronas, permite conocer cómo está el paciente a lo largo del día para poder programar a la medida e incluso tener una estimulación responsiva.
El dispositivo con información precargada estudia a qué nivel las neuronas provocan temblor, rigidez, lentitud y eso permite conocer cómo y cuándo y a qué voltaje debe mandar la estimulación para llegar a controlarlo de manera óptima, agregó.
Comentó que la estimulación profunda se estudia en Torreón desde el 2021, que fue cuando se realizó la primera cirugía de estimulación y de ahí se ha estado implantando a pacientes, pero este es el más avanzado.
La cirugía fue realizada en colaboración con Ortec Implantes Médicos, proveedor líder en la región de instrumental y material médico, comprometidos con el bienestar y la salud de la comunidad.
La terapia de estimulación cerebral profunda manifestó que puede ayudar a disminuir muchos de los síntomas de la enfermedad de Parkinson.
AFECTA EL SISTEMA NERVIOSO Y LAS PARTES DEL CUERPO
La enfermedad de Parkinson es un trastorno progresivo que afecta el sistema nervioso y las partes del cuerpo controladas por los nervios. Los síntomas aparecen lentamente.
El primero puede ser un temblor apenas perceptible en una sola mano. Los temblores son habituales, aunque el trastorno también puede causar rigidez o una disminución del movimiento.
En las etapas iniciales de la enfermedad de Parkinson, el rostro puede tener una expresión leve o nula. Es posible que los brazos no se balanceen cuando caminas. El habla puede volverse suave o incomprensible. Los síntomas de la enfermedad de Parkinson se agravan a medida que la afección evoluciona.